Mediante la NCG 519, dictada luego del proceso de consulta pública realizado entre el 19 de agosto y el 27 de septiembre de 2024, la CMF ha aplazado la obligación de reportar por primera vez una memoria integrada para los emisores de valores que aún no lo han hecho; ha adoptado normas internacionales en materia de sustentabilidad; y ha excluido de la obligación de presentar una memoria integrada a las entidades para las que la exigencia regulatoria resulta proporcionalmente más costosa.